viernes, 23 de abril de 2010

En el cielo nocturno

Cuando miro las estrellas brillar en toda su grandeza, un presentimiento en el que eres protagonista se alza en mi, y siento que cada titilar se acompasa con los latidos que mi corazón profesa hacia ti. Pasas ligero como el viento que roza mi cara, pero tan fuerte como el brillo del astro ausente en la noche oscura. Entonces recuerdo tu risa y sonrío, escucho tus palabras y me sonrojo. Y de repente floto, me elevo en un sueño casi inmutable, el sueño de tu amor, me envuelvo en tu presencia y soy feliz.

Algunas veces despierto en la mañana con esa hermosa sensación todavía palpitante en mi pecho y en mi intento por conservar tu aparición construyo un día casi perfecto. Otras mañanas en cambio, doy vertiginosas vueltas y mis pies retornan al suelo, haciendome percibir lo que solo fue un efímero sentir, algo que solo podría ser una intensión mas de mi ilusión.

Pero los peores momentos, son aquellos en que tu mismo me devuelves a la tan temida realidad. que me hundes en las negras sombras de la tristeza y el dolor de no ser correspondido. Es allí cuando veo que hasta el día mas alegre se desvanece transformado en la noche más tormentosa.

1 comentario:

  1. Severo escrito mujer, demasiado bueno en realidad.

    Nada como poder expresar en papel o pantalla todo eso que se lleva adentro y debe explotar de alguna forma, en tu caso, la mejor de ellas.

    Un abrazo

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